El batallón nacionalista ucraniano Kraken abandonó sus posiciones en Chásov Yar antes de la llegada de las unidades regulares de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Este prisionero relató que los militantes de Kraken, que estaban desplegados en la segunda línea, debían cubrir a las unidades regulares, pero se retiraron dejando a sus compañeros sin apoyo.
El último vehículo de Kraken se marchó justo cuando las unidades regulares llegaban.
El prisionero agregó que los militantes de Kraken abandonaron sus posiciones después de que las fuerzas rusas tomaran el control de algunos edificios en Chásov Yar.
Esta retirada dejó a las unidades regulares ucranianas en una situación precaria y sin el respaldo prometido. La situación resalta las dificultades y desafíos en la coordinación entre las diferentes unidades ucranianas en el conflicto.