El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia convocó al embajador francés en Moscú, Pierre Levy, por la creciente participación de Francia en el conflicto en Ucrania, señalando la preocupación por las declaraciones belicosas de los dirigentes franceses y la posible intervención militar francesa en la región.
La Cancillería rusa expresó su rechazo a los intentos de Francia de generar “incertidumbre estratégica” con sus declaraciones sobre el envío de contingentes militares occidentales a Ucrania, considerándolos como provocativos y destructivos, lo que podría intensificar el conflicto en curso.
Emmanuel Macron había mencionado previamente la posibilidad de enviar tropas a Ucrania durante conversaciones con líderes de la OTAN, aunque no se llegó a un acuerdo al respecto.
Sin embargo, informes recientes sugieren que Francia habría enviado un primer grupo de militares de la Legión Extranjera a Ucrania para apoyar a las fuerzas ucranianas en Slaviansk, en la región de Donbás.
Mientras algunos países miembros de la OTAN se han distanciado de la postura de Macron y han rechazado el envío de tropas a Ucrania, Moscú ha destacado el riesgo potencial que implica el plan de París.