Rusia, miembro de BRICS, ha desechado $4.5 mil millones en bonos de EE.UU. en los últimos dos años.
Tras las sanciones impuestas por EE.UU. en febrero de 2022 debido a la invasión de Ucrania, el Banco Central de Rusia descargó $30 millones en bonos como un primer paso, continuando con una venta constante de deuda estadounidense.
Este movimiento se alinea con la agenda de desdolarización de BRICS y la reducción de vínculos con la economía estadounidense.
Rusia no es el único país de BRICS que se está deshaciendo de los bonos de EE.UU.
China ha vendido casi $74 mil millones en los últimos siete meses. Además, el Banco Central de China ha estado acumulando oro en sus reservas, abandonando los dólares estadounidenses en los últimos 24 meses.
En general, el bloque BRICS ha sido el mayor comprador de oro en los últimos dos años, superando a los fondos institucionales e inversores minoristas globales.
Esta estrategia de desdolarización de BRICS podría ejercer presión sobre el dólar estadounidense si los países en desarrollo comienzan a distanciarse de la economía americana. Tal desarrollo podría llevar a la hiperinflación en EE.UU., haciendo que los precios de los productos esenciales se disparen.
La economía estadounidense necesita inversiones extranjeras a través de bonos para financiar su déficit, y la pérdida de estas inversiones podría tener consecuencias graves.